Ifrane, una de las ciudades más interesantes de Marruecos, está ubicado en las montañas del Medio Atlas a nada menos que 1713 metros sobre el nivel del mar. Si vamos de vacaciones Marruecos es sin duda una ciudad que tenemos que visitar. Creado hace nada (en 1929) por los franceses, es seguramente una de las ciudades más limpias de Marruecos, aunque otros lo definen como una pequeña ciudad suiza en medio de Marruecos. Tanto en verano como en invierno, Ifrane es un estupendo lugar para elegirlo como punto de partida de excursiones.
Es una ciudad llena de placios y casas de campo con techos empinados, típicos de montaña. Se ubica en medio de un bosque de cedros, lo que lo convierte aún en más bello. De hecho, podríamos decir que la ciudad es el sueño de cualquier fotógrado ya que, apuntemos donde apuntemos con la cámara no encontraremos nada más que hermosos objetivos. Hay que decir que para visitar Ifrane, la gente normalmente suele escoger el invierno, ya que es un destino de deportes de invierno.
Otro de los atractivos de Ifrane, en esta ocasión un atractivo monumental es un Mausoleo del siglo XVI. Cierto es que la ciudad comenzó a construirse desde cero con los franceses, pero el Mausoleo ha estado allí desde antaño, conocido como el Mausoleo Azul y lugar de peregrinación desde hace siglos. Además, existen algunas viviendas trogloditas (cuevas-vivienda), que hoy día son utilizados como almacenes o establos.
En fin, Ifrane es una ciudad impresionante, curiosa y misteriosa, donde el viajero no se aburrirá ni dejará de sorprenderse al encontrar un lugar así en Marruecos, aquel país que en nuestro imaginario colectivo se viste de amarillo y calor. Ifrane, en este sentido, es todo lo contrario, verde y fresco, no en vano posee el sobrenombre que antes comentábamos, el de la pequeña ciudad Suiza en Marruecos. Parece una contradicción, cierto, pero en realidad no le falta razón.
Foto Vía:nssaw tawahd