Florencia, ciudad monumental

Florencia, ciudad monumental 2

Florencia es una de las típicas ciudades monumentísticas de Italia. Si queremos conocer su esencia y así vivir parte de la gran cultura que vivió el territorio, siendo referente arquitectónico y artístico de toda Europa durante siglos, no dudemos en alquilar desde ya un alojamiento en uno de los hoteles en Florencia.

En Florencia podemos hacer varias rutas, todas ellas interesantes. Por ejemplo, podemos pasear yendo desde el gótico hasta el renacimiento. Para este paseo podemos comenzar en Santa Croce, una iglesia gótica con frescos de Giotto y Gaddi, esculturas de Donatello y un hermoso patio donde la relajación es el atractivo principal. Desde aquí podemos ir a la Capilla de Pazzi de Brunelleschi, ejemplo del renacimiento y obra maestra pequeña con proporciones clásicas.

En este paseo, la plaza más importante de Florencia bien se merece una foto. En la Piazza della Signoria podemos pasear por los arcos del museo de Uffizi y continuar a los bancos del río de Arno con una hermosa vista al Ponte Vecchio, un puente antiguo asombroso, con joyeron florentinos establecidos en él.

Pero desandemos el camino andado, la plaza de Santa Croce es también impresionante, donde se recomienda pasear hacia el Palazzo Medici Riccardi. Podemos a la vez echar una mirada al palacio de Michelozzo, hecho para Cosimo de Medici y que fue referencia de todos los palacio del Renacimiento. Podemos visitar los frescos de Gozzoli del patio y de la visión en la Capilla dei Magni. El exterior es asombroso, visible desde las calles estrechas. Podemos, por último, antes de descansar, visitar los laboratorios históricos de Florencia con la intención de ver cómo las mismas artesanías del renacimiento tienen su lugar hoy día.

Después de descansar podemos ir a la Piazza San Giovanni y a la Catedral. Se trata de una plaza bonita llena de encantos como, por ejemplo, el Baptisterio, con las puertas de Ghiberti que el mismo Miguel Angel definió como que pudieran se las puertas del Paraíso. La enorme bóveda de la Catedral, hecha por Brunelleschi puede ser admirada desde el fondo, desde la torre de la campana subiendo apenas 4 peldaños. Desde aquí también podemos ver una hermosa panorámica de la ciudad, aunque lo cierto es que no se recomienda para los que tengan vértigo.

En fin, mil opciones de mil rutas para una ciudad que mantiene su encanto aún en el aire.

Foto Vía: MarcusObai