Siempre he pensado que se puede viajar con los niños a cualquier parte, siempre y cuando busquéis para ellos algo de diversión. Es más, nosotros hoy incluso nos atrevemos a plantearos la posibilidad de viajar con niños a Sao Paulo. ¿Pensáis que no es posible?…
Lo primero es reservar nuestro viaje y nuestros vuelos Sao Paulo, incluso dejándoles que participen en la elección, para que se sientan integrados incluso antes de viajar. Una vez en la ciudad hay una serie de lugares que seguro que les gustará.
Podríamos empezar con la imponente arquitectura de la Galería dos Paes, situada en las esquinas de las calles Estados Unidos con Haddock Lobo. De ahí podemos acercarnos al Instituto Butantan y el Museo Biológico, con sus serpientes, escorpiones y arañas. Muy parecido es el Museo de Microbiología o el Museo de Historia, también en el instituto.
Para comer nada mejor que el Restaurante Choperia Cachaçaria Pompeia, un rancho mexicano situado en el centro de Sao Paulo. Dentro del restaurante hay incluso un pequeño zoológico con animales domésticos. Los fines de semana organizan paseos a caballo en carros de dos ruedas por el recinto.
Después de comer nos vamos hasta el Parque da Monica, un parque de más de diez mil metros cuadrados. Encontraréis teatros de títeres y paseos a caballo. Si lleváis niños más mayores, pasamos del parque y vamos a a la sala de juegos de Marginal do Tiete, inaugurada en 1973, con más de treinta atracciones.
También podemos pasar el resto de la tarde, o incluso el día entero, en el Zoológico de Sao Paulo. Inaugurado en 1957, cuenta con más de 3.200 especies, entre las que veréis mamíferos, aves, reptiles, anfibios e invertebrados que casi se diría que viven en su hábitat natural.
Justo al lado del zoológico está el Zoo Safari. Allí podéis entrar con vuestro coche para hacer un auténtico safari, visitando muy de cerca a los ciervos, leones, tigres y jaguares. Si tenéis tiempo, otra visita sería el Jardín Botánico de Sao Paulo, donde los niños pueden divertirse aprendiendo un poco sobre la flora del lugar.
Para cenar por la noche, lo mejor es llevar a vuestros niños a TGI Fridays, un típico restaurante americano en donde se pueden comer hamburguesas, sandwiches y menús especiales para los más pequeños.
Como véis, hasta una ciudad como Sao Paulo tiene algo para ofrecer a los que viajan con niños. Sólo hace falta planificar bien el viaje y lanzarse a la aventura.
Foto Vía Cenas da Cidade