A la vuelta de la esquina se encuentra el puente del Pilar y esa puede ser una fecha perfecta para sorprender a tu pareja con una escapada romántica. Muchas son las ciudades que puedes elegir como destino para ese viaje, no obstante, una de las más acertadas es Madrid. ¿Por qué? Porque os ofrece multitud de actividades culturales de las que disfrutar, numerosos lugares para conocer, restaurantes de gastronomías de todo el mundo…Todo eso sin pasar por alto una amplia oferta de hoteles, de distinta categoría y precio, como puedes comprobar, por ejemplo, en Viajemos.com.
Pero además de todo eso, es importante que sepas que en la capital española tienes además un sinfín de lugares románticos que serán especiales para declararle tu amor a tu pareja, pedirle matrimonio o simplemente hacer de esta escapada un recuerdo inolvidable:
-Templo de Debod. Muy próxima a la Plaza de España se encuentra esta construcción, datada en el año 2.000 a.C y que fue regalada por el gobierno egipcio, que debe ser una de vuestras paradas obligatorias. Y es que se enmarca en una zona ajardinada de gran belleza, que no sólo evoca el lejano oriente sino que permite ver unas espectaculares vistas de la ciudad cuando anochece. Así, bajo la luz de la luna sentiréis que en el mundo sólo estáis vosotros y la silueta de Madrid.
-Dalieda de San Francisco. En pleno Madrid de los Austrias, junto a la espectacular Basílica de San Francisco el Grande, se encuentra situado este pequeño jardín de dalias. El mejor momento, sin duda, para admirarlo y dejarse hechizar por la ciudad es al atardecer, ya que permite disfrutar de unas vistas muy hermosas de la urbe.
-Azotea del Círculo de Bellas Artes. Uno de los enclaves más mágicos de la capital española es, sin lugar a dudas, este, ya que permite gozar de unas impresionantes vistas aéreas de la urbe a 360º. Allí creeréis que estáis tocando el cielo, por la altura del edificio y porque tendréis un marco incomparable para demostraros todo lo que os queréis.
-Plaza de España. Madrid es una ciudad que no se detiene, que está continuamente viva con el trasiego de viandantes, con las luces de los teatros y cines, con los coches que vienen y van sin parar por sus calles principales…Sin embargo, cuando empieza a anochecer esta zona situada junto a la Gran Vía se convierte en un espacio ideal para relajarse, sentarse bajo las estrellas y admirar el conjunto escultórico homenaje a Cervantes. Así, teniendo al enamorado de Dulcinea como testigo, siempre podréis declararos lo que sentís el uno por el otro.
