Uno de mis mayores placeres turísticos es pasear por la noche. La mayoría de las grandes ciudades tienen dos caras totalmente diferentes: una la que podemos ver a la luz del día, y otra la que subyace tras la iluminación artificial cuando llega la oscuridad.
Una de las ciudades de las que guardo mejor recuerdo de noche es Berlín. La grandiosidad de sus monumentos y edificios parece aún mayor ante el juego de luces. Además tuve la enorme suerte de visitarla durante el mes de octubre cuando, desde el año 2004, la capital alemana celebra el Festival de las Luces. Tiene lugar sobre todo durante la segunda quincena del mes, buena fecha para planificar vuestros viajes Berlín.
El año pasado tuvo lugar entre los días 12 y 24 de octubre. Durante estas casi dos semanas los principales edificios de Berlín se iluminan de una manera un tanto especial. Cada dos minutos el juego de luces despierta la fascinación de los turistas. La Catedral de Berlín, la Alexanderplatz, el Ku’damm, la Puerta de Brandemburgo, la zona de Charlottenburg y muchos más son los rincones de la ciudad que se iluminan de forma espectacular.
Así Berlín y sus principales edificios sirven de escaparate a un juego de luces asombroso. Pero, además de este espectáculo, durante esa segunda quincena de octubre se celebran en la ciudad otros eventos paralelos. Son actividades culturales que van desde visitas guiadas y recorridos turísticos por toda la ciudad, hasta visitas nocturnas a los principales museos.
El año pasado la inauguración del Festival de las Luces tuvo lugar con un increíble encendido en la Kurfurstendamm, una de las principales avenidas de la ciudad alemana. No faltaron tampoco las iluminaciones y los conciertos en algunos de los pubs y locales de ocio más conocidos de Berlín. Además, coincidiendo con este evento, tiene lugar también el Jazz at the Minister Gardens.
Este es uno de mis recuerdos de la noche berlinesa. Si estáis pensando visitar próximamente la capital alemana, os sugeriría esperar hasta octubre y así, de paso, disfrutar de su Festival de las Luces. Si no es posible, cualquier momento del año es bueno para pasear de noche por una ciudad conmovedora.
Foto Vía Magazine Magix
