Córdoba y su patrimonio arquitectónico

Córdoba y su patrimonio arquitectónico 2

La ciudad de Córdoba se ha caracterizado históricamente por la confluencia de culturas, que ha configurado un paisaje urbano y un patrimonio histórico-artístico de primer orden. Esta particularidad la ha convertido en un destino turístico apreciado en todo el mundo, por sus monumentos, por la calidad de sus infraestructuras y por la calidez con la que, año tras año, recibe a sus visitantes.

En 1994, la Unesco elevó parte de su casco histórico a la categoría de Patrimonio de la Humanidad, por un conjunto arquitectónico encabezado por la Mezquita, un edificio único en Europa y símbolo de la dominación árabe de la Península que, además, engloba en su recinto una Catedral cristiana. Sus numerosas puertas, entre las que destacan las de al-Hakem II, la del Perdón y la de Santa Catalina encierran maravillas como no se encuentran en ningún otro lugar, como el Patio de los Naranjos, sus fuentes y el «bosque de columnas».

La gran oferta de Hoteles en Córdoba nos garantiza una estancia cómoda, de calidad y apta para cualquier tipo de visitante, desde los más aventureros hasta los acostumbrados a las facilidades, las visitas guiadas y, por qué no, el lujo. Desde cualquiera de estos establecimientos podremos visitar también la Judería, un laberinto de calles protagonizado por una de las tres Sinagogas que se conservan en España.

No nos podemos perder puntos de interés como la Puerta de Almodóvar, el Museo Diocesano, el Hospital del Cardenal Salazar, actualmente Facultad de Filosofía y Letras o el Museo Taurino, que reúne piezas relacionadas con el toreo desde el s. XVIII. También destaca el Alcázar de los Reyes Cristianos, antigua fortaleza por cuyos jardines paseó Isabel la Católica; el barrio de San Basilio, famoso por sus patios, y otros muchos lugares, como los antiguos molinos musulmanes, el puente romano, las torres defensivas… Un verdadero museo al aire libre en el que bien vale la pena pasar unos días.

Foto: Bert Kaufmann