Hoy nos vamos al sur de España, concretamente a la provincia de Málaga. Nos situamos en el precioso pueblo blanco de Mijas, en plena Costa del Sol. Sus pintorescas y estrechas callejuelas, sus casas blancas y un bosque de pinos como telón de fondo se presentan como un marco incomparable para vuestras próximas vacaciones de verano.
Mijas tiene unas vistas de la costa mediterránea espectaculares. Se halla 400 metros por encima del nivel del mar, y desde aquí es posible ver buena parte de la maravillosa y admirada Costa del Sol. Por sus estrechas calles empedradas circulan los famosos burro-taxi, que os recomendamos desde aquí si queréis recorrer de forma tradicional la ciudad, visitando sus edificios históricos y otros lugares de interés.
Mijas fue fundada por los tartessos, y se convirtió en fortaleza para los romanos. En el siglo XV el ejército cristiano la usó como cuartel militar y se asentó en ella después de conquistarla a los musulmanes. Se trata de un destino muy popular para los turistas. Mijas cuenta en la actualidad con unos 7000 habitantes, sobre todo en los meses de verano. Los numerosos restaurantes y las tiendas de artesanía responderán a vuestas necesidades de ocio.
Cuando queramos organizar una visita a Mijas no nos podemos olvidar de sus ruinas romanas y árabes, el Museo de Miniaturas, la Plaza de Toros, la Ermita del Calvario y la Iglesia de la Inmaculada. El teatro al aire libre es un lugar perfecto para ver algún espectáculo de verano.
Una de las atracciones más visitadas de Mijas es el Santuario de la Virgen de la Peña, construido en la roca en 1586. Allí se venera a la patrona de la ciudad, y recuerda el sitio exacto en el que la Virgen se apareció. Otro de los bellos lugares de Mijas es la Ermita de Santa Ana, en la plaza del mismo nombre, construida en el siglo XVIII. También vale la pena visitar la Iglesia de San Sebastián, con su notable fachada.
Existen numerosos miradores en todo el pueblo. Uno de los más bonitos son los Jardines de la Muralla, ya que, aparte de las espectaculares vistas, podemos disfrutar de la belleza y el color del jardín. Otra buena atalaya para ver el valle de Mijas y sus alrededores es la que tenemos desde la Ermita de El Puerto, construida en el siglo XVI por los monjes mercedarios. En una ladera por encima de Mijas se sitúa el Santuario del Calvario, construido en el siglo XVIII, y que parece velar por el pueblo.
Paseando por el pueblo podemos encontrar el Restaurante El Capricho, en el centro de Mijas, que bien merece una visita. Además de este, hay una gran variedad de bares de tapas y restaurantes para todos los gustos. Para comprar en Mijas hay una floreciente artesanía de pinturas, cerámica artesanal, ropa de cama hecha a mano, objetos de mimbre, miel y pan.
Esta zona se hecho famosa también por sus magníficas instalaciones para la práctica del golf. El alojamiento es muy abundante en la propia Mijas y sus alrededores, no es difícil encontrar hoteles en Málaga, con una amplia selección de buenos hoteles, hostales y casas en alquiler. Todo para que disfrutéis al máximo vuestra estancia en uno de los rincones más idílicos de la Costa del Sol.
Foto: Vía Virtualtourist