Tynemouth está ubicado en la costa noreste de Inglaterra, a tan sólo seis millas (unos diez kilómetros) de Newcastle. De hecho, es posible llegar a allí empleando el metro de esta ciudad. Sin embargo, recorrer esa distancia supone un cambio total en el paisaje que se encuentra el visitante. Tynemouth tiene el encanto de las ciudades costeras inglesas. Un remanso de paz con bonitas playas que permiten, además, practicar toda una serie de deportes de agua, desde el surf hasta la natación o el wind surfing. Todo ello entre casas de pequeña altura, con tiendas en la parte baja, que nos remiten a un mundo más próximo a lo rural que a la gran ciudad. Los edificios que constituyen el núcleo de Tynemouth tienen además el encanto añadido de su antigüedad, pues muchos de ellos proceden de los siglos XVIII y XIX.
Otro atractivo de la ciudad es su monasterio, situado sobre el río y que se remonta al siglo XI. Sus ruinas, abiertas al público, tienen un matiz de melancolía cubiertas por la niebla de la costa. No es el único punto de interés que ha traído hasta Tynemouth a los visitantes. Sus playas y una serie actividades que allí se organizan atraen la atención de muchos. Entre las playas podríamos mencionar Tynemouth Longsands, especialmente propicia para la práctica del surf. De hecho, en ella se celebran competiciones internacionales de este deporte. Kind Edward´s Bay es una playa de menor tamaño, próxima al monasterio.
Para los que prefieran darse un paseo, en Front Street es posible encontrar restaurantes en los que tomarnos los conocidos fish and chips, así como boutiques, cafés y, en definitiva, todo tipo de tiendas en las que entretenernos.
Tynemouth es además la sede de dos festivales de atractivo para los visitantes: Fish Quay Festival, que incluye música, actividades callejeras y fuegos artificiales con las ruinas como fondo, y Mouth of Tyne Festival (MOTFest), en el que la música en directo es también una de las principales protagonistas.
Son, pues, muchas las razones que hacen de Tynemouth un lugar recomendable en el que pasar al menos una tarde de visita. Su proximidad a Newcastle y las posibilidades de ocio que nos ofrece lo hacen un destino agradable y entretenido para toda la familia.
Foto vía www.photographer-northeast.co.uk