Todos los amantes de el arte, la arquitectura y la historia tienen en la ciudad de Segovia un valor seguro a la hora de elegir un lugar para una escapada o unas completas vacaciones. Si buscamos hoteles en Segovia, económicos o lujosos, encontraremos una amplia variedad de establecimientos, incluyendo un Parador Nacional de Turismo a escasos minutos del centro de la ciudad y multitud de hoteles, albergues y pensiones aptos para todos lo gustos y bolsillos, además de una excelente oferta gastronómica famosa en toda España.
Esta población castellano-leonesa cuenta con una historia milenaria y, por lo tanto, con un legado monumental que la sitúa entre las más visitadas de España. De esta manera, todo este valor patrimonial y cultural le valió en 1985 la declaración por parte de la Unesco como Patrimonio de la Humanidad, en especial por el archiconocido acueducto y el casco antiguo, verdaderas joyas que merecen ser preservadas y, al mismo tiempo, difundidas para el disfrute de los visitantes de todo el mundo.
En particular, hay unos cuantos puntos imprescindibles en la ciudad para cualquiera que quiera conocer un poco su historia y cultura, entre los que se encuentra naturalmente el Acueducto, en la plaza del Azoguejo, que data probablemente de los siglos I y II d.C. Realizado con 25.000 sillares de granito, se trata de la obra civil romana más importante de España. El Alcázar, construido en época de transición del románico al gótico, es una verdadera maravilla, sobre todo por sus salones de decoración mudéjar, que vieron pasar a reyes castellanos como Alfonso X el Sabio, Enrique IV o Isabel la Católica.
El Monasterio de San Antonio el Real y la Catedral de Santa María merecen una visita pausada, dada la relevancia artística y belleza de su estructura y decoración, en especial esta última, considerada la última catedral gótica construida en España. También vale la pena recorrer los restos de la antigua muralla, que recorre la ciudad vieja y conserva las puertas de San Cebrián, Santiago y San Andrés, sirviendo ésta de acceso a la antigua judería, que acoge la sinagoga (actualmente iglesia del Corpus).
Foto: Rubén Vique