Mindelo era testigo el 27 de agosto de 1941 del nacimiento de Cesaria Évora, la diva de los pies descalzos, la mujer que tal vez con su voz y su música puso en el mapa de todos a Cabo Verde. Un archipiélago como salpicado en el Atlántico, atravesado por las costumbres y las tradiciones brasileñas y portuguesas. Un destino que en los últimos años ha cobrado protagonismo gracias a su exuberante naturaleza y el sabor sugerente de sus playas escondidas.
Aquellos que estáis buscando vuestros viajes a Cabo Verde organizados os recomiendo especialmente la Isla de Santo Antao, la más occidental de las diez que conforman este archipiélago. Con sus 43 kilómetros de longitud y 24 de ancho es la segunda más grande de Cabo Verde, pero la preferida por los turistas. Las ribeiras que atraviesan su orografía le dan un carácter peculiar, muy tradicional y popular.
Estas ribeiras no son más que cañones en los que los agricultores han establecido un sistema de cultivo en terrazas. Se dedican especialmente a la caña de azúcar, aunque ahora también deben compaginar esta actividad con el turismo. Cientos de turistas se pierden por las rutas de senderismo que se han creado alrededor de la Ribeira Grande, que engloba a las de Paúl y Figueiral. Es como volver al pasado en medio de un estallido de verde y simpatía local.
Santo Antao es también una isla de origen volcánico. Sin ir más lejos su cima más alta es el Topo da Caroa, un volcán inactivo de casi dos mil metros de altitud. No es el único ya que le acompañan el Gudo de Cavaleiro y el Pico da Cruz. El hecho de que en un territorio de apenas cuarenta kilómetros tengamos tres colosos de más de 1.500 metros da cuenta del carácter montañoso de esta isla. Esta pequeña cadena de montañas separa el norte y el sur de Santo Antao.
Hay algunos otros elementos de destacado interés para el turismo, como la pequeña localidad de Fontainhas, enclavada en un hermoso valle verde, cerca de Punta do Sol; o la silueta del acueducto de Ribeira Grande, construido para salvar el paisaje tan escarpado de la isla. Precisamente esta belleza provoca que el ecoturismo y el turismo de aventura sean los más demandados por los viajeros en esta zona de Cabo Verde.
– Cómo llegar a Santo Antao
La mejor manera de llegar hasta esta isla es a través del mar. Desde Mindelo hay conexiones regulares, ya que el trayecto apenas es de una hora de duración.
Foto Vía Biz Travels