Islas Baleares: objetivo Menorca

Islas Baleares: objetivo Menorca 2

Las Islas Baleares son escogidas por multitud de turistas de todo el mundo para pasar sus vacaciones. Calas de excepción, historia, ocio y diversión y lugares donde perderse son algunas de sus características.

Si el pasado año un conocido anuncio de cerveza escogió a Formentera como protagonista, este año ha sido Menorca el escenario. Un paisaje perfecto para un verano perfecto. Sol, mar, amor, gastronomía… y parece que funciona porque la isla de la calma está siendo algo más movidita.

De todas maneras, el turismo de Menorca es siempre mucho menos masificado que, por ejemplo, Mallorca preservando algunas zonas todavía vírgenes y lejos de impresionantes construcciones. Ello le dota de un legado histórico especial y paisajes de ensueño bañadas por verdes azulados en todos los rincones.

Pasear por la isla nos da opción a descubrir las calas de Menorca. Lugares recónditos donde podemos estar prácticamente solos. Se trata de buscar y quedarse con aquella que prefieras. Destacan las de gran calidad que engloban pequeñas playas rocosas, con cuevas abruptas, ideales para practicar submarinismo u otro deporte acuático.

La navegación está muy extendido y podemos realizar excursiones a borde de un barco que recorre la isla y los lugares a los que no puedes llegar por cuenta propia. No te lo pierdas.

Una vez en tierra, destacan los yacimientos arqueológicos, muy típicos de las Islas Baleares que engloban poblados de la época paleolítica muy importantes para el patrimonio universal. Por otra parte, los faros que recorren las costas y las torres acaban siendo importantes restos que pululan por todos los rincones. Eran fortificaciones que servían de defensa contra los barcos que procedían de otros lugares en la Edad Media.

Ahora son restos, algunos perfectamente conservados, que podemos visitar tanto desde su interior como desde su exterior. Al igual que las iglesias y la catedrales, de la que sobresale la de Ciutadella, la capital.

Foto: always2ndbest