Grecia es uno de los países con más cultura por explorar. Su tierras son fantásticas, el sol, las islas y una capital fuera de serie que es todo un museo al aire libre. Son numerosos los cruceros desde Atenas que nos llevan tanto a las islas griegas como a otras entornos mediterráneos y hasta a Estambul.
Si hacemos parada en Atenas, de la ciudad nos impresiona el gran Partenon, máximo edificio que nos da un ejemplo de cómo eran los monumentos en la época griega. Sus columnas, las figuras, las esculturas… son realmente auténticas. Además se halla situado en una alta montaña desde donde ver la ciudad a nuestros pies.
Los museos de alrededor están cargados de diversos restos de gran importancia. En las tiendas de artesanía que ocupan las calles colindates podemos adquirir piezas e imitaciones de estos edificios. Son muy preciados los jarrones y platos de terracota con representaciones de guerreros griegos.
En algunos lugares también está aceptado el regateo, de manera que podrás conseguir estas piezas a un precio más asequible, aunque realmente no es caro. Tampoco lo es su sabrosa gastronomía, de hecho se come estupendamente por precios casi regalados por la cantidad que ofrecen.
Recomendamos los postres dulces y muy contundentes igual que las salsas para las ensaladas y primeros platos. Al estar al lado del mar, sus pescados son también preciados.
Si deseamos hacer una escapada a las islas griegas, Mykonos es una de las que más está de moda. Sus fiestas interminables en la playa la han convertido en un pequeño paraíso similar a Ibiza con una gran riqueza cultural.
Llaman la atención sus casas blancas, que recorren prácticamente todas las islas de esta zona, su agua azul intenso y sus largas playas con algunas calas casi vírgenes. Sólo nos queda tomar un vino exquisito junto al mar.
Foto: aamaianos