La capital de Puerto Rico, San Juan, es una de las ciudades con más historia de América, con una fascinante herencia cultural en todos los ámbitos. Casi todos los aspectos que caracterizan el espíritu boricua se pueden encontrar en esta encantadora ciudad: música, gastronomía, arte, educación, ocio… y la especial forma de ser de sus habitantes, siempre dispuestos a hacer más fácil la estancia del visitante en su maravilloso país.
El peculiar estatus de Puerto Rico, como estado libre asociado a los Estados Unidos de América, también cuenta en la percepción que, como turistas, podemos tener de la isla nada más tomar tierra con un vuelo a San Juan. Cultura norteamericana mezclada con sabor caribeño, competencia y actitud sumadas a espíritu festivo y alegre, en una mezcla que cada día seduce a más gente de todo el mundo.
Fundada en 1509 por Juan Ponce de León, en la época los viajes de Cristóbal Colón, desde sus inicios la ciudad se significó como un importante puerto comercial y entrada a las Américas, y tuvo un importante papel en la historia del continente, reuniendo en un solo lugar las culturas indígena, española, africana y, más tarde, norteamericana. Algunos de las atracciones más interesantes de San Juan datan precisamente de estos primeros tiempos desde su fundación, como el Castillo de San Felipe del Morro, la Catedral, el Fuerte San Gerónimo, la Puerta de San Juan y particularmente, la Iglesia San José, la segunda más antigua de América, con incluso reminiscencias del gótico más tardío.
De épocas posteriores son otro monumentos como el Arsenal de la Puntilla, la Capilla del Santo Cristo de la Salud, la Cárcel de la Princesa, la Casa Rosa o el Castillo de San Cristóbal. Destacan también los edificios de la Aduana Federal, el Banco Popular de Puerto Rico, el Edificio Federal o el Capitolio, símbolos de la presencia administrativa de los Estados Unidos en la isla caribeña.
Foto: Ricardo Mangual
