Al igual que sucede con otras grandes capitales europeas, cuando oímos hablar de Roma acuden a nuestra mente de inmediato cientos de imágenes preconcebidas sobre sus monumentos y e historia, patrimonio ya de nuestro imaginario popular. Hoy en día tenemos la oportunidad de acceder fácilmente a vuelos baratos a Roma que nos permiten comparar nuestra idea de la capital italiana con su realidad, siempre tan cambiante y particular.
Sin duda, hay algunos puntos clave en la ciudad que, en una primera visita, se antojan como imprescindibles: la Ciudad del Vaticano, con la impresionante extensión de la Plaza de San Pedro y su basílica; el Castel Sant’ Angelo, sede del Museo Nacional; Plaza Navona, el Pantheon, la Plaza de España, célebre por su escalinata y por su fuente… Todos ellos monumentos con una larga historia a sus espaldas, que nace en los tiempos de auge y esplendor del Imperio Romano y llega hasta nuestros días cargada de curiosidades, anécdotas y datos curiosos que siempre conseguirán sorprendernos.
El Coliseo, que debe su nombre a la colosal estatua de Nerón que lo presidió antaño, es otro de los puntos de interés obligados para el turista, y cada vez nos ofrece nuevos puntos de vista y rincones insospechados. Los Foros constituyen el área arqueológica más importante de la capital transalpina, no en vano cuentan con un recorrido que se remonta al s. VII a.C., punto desde el que se suceden los hallazgos históricos con una abundancia prácticamente inédita en el mundo. La colina del Capitolio fue, desde los orígenes de la ciudad, el principal centro de poder y lugar de manifestaciones y celebraciones públicas. Hoy en día, además de ser sede de la administración municipal, alberga los Museos Capitolinos, en que podemos admirar las obras de los mejores artistas del Renacimento.
No obstante, en Roma no todo son ruinas y monumentos: entre visita y visita, vale la pena entretenerse en contemplar y, por qué no, participar activamente en la dinámica vida ciudadana, en su amplia oferta comercial y en sus manifestaciones culturales y de ocio, siempre en movimiento, como corresponde a la que fue, con todo merecimiento, capital del mundo antiguo.
Foto: Malkav