En el siglo VIII es donde se encuentra el origen de una de las ciudades asturianas más bellas: Oviedo. Una urbe esta, capital del Principado, que ofrece al visitante una riqueza cultural majestuosa y también un patrimonio arquitectónico y artístico de gran calado como así lo demuestra el hecho de que esté catalogado como Patrimonio de la Humanidad.
Si aún desconoces cuales son estas edificaciones que no debes dejar de conocer en la citada ciudad, aquí te damos a conocer algunos de los más significativos:
Catedral de San Salvador. A finales del siglo XIII fue cuando comenzaron las obras de construcción de dicho templo que se enmarca dentro del estilo gótico y que asienta sobre una anterior edificación religiosa prerrománica. Entre todos sus elementos y estancias destaca especialmente la Cámara Santa, del siglo IX, donde se conserva el símbolo de la ciudad: la Cruz de los Ángeles.
Iglesia de Santa María del Naranco. En el Monte Naranco es donde se encuentra enclavada esta que tiene el privilegio de ser una de las mejores joyas del llamado estilo arte asturiano y que se puso en pie, en el siglo IX, como Aula Regia del que fuera palacio del rey Ramiro I.
Casa de la Rúa. Dentro de la arquitectura civil de Oviedo destaca esta edificación, también llamada Casa del Marqués de Santa Cruz de Marcenado, que se caracteriza por ser una de las más antiguas dentro de aquella que se encuentran en la ciudad. Y es que fue de las pocas que consiguieron salvarse del gran incendio que asoló la población en las primeras décadas del siglo XVI.
Iglesia de San Julián de los Prados. A los mártires San Julián y Santa Basilisa se les rindió homenaje con la construcción en el siglo IX de este templo que es uno de los más bellos que tiene Oviedo dentro del estilo asturiano.
