La belleza de sus playas y su gastronomía son dos de los principales atractivos turísticos que posee la localidad malagueña de Fuengirola, que se ha convertido en uno de los destinos de la Costa del Sol preferidos tanto por viajeros nacionales como extranjeros. De ahí que cuente no sólo con una interesante red de transportes sino también con numerosos hoteles en Fuengirola económicos.
Pero lo que debe saber todo visitante es que además de disfrutar de dichos elementos, y también de su intensa actividad nocturna, en estas tierras malagueñas existe la oportunidad de realizar un recorrido por algunos de los monumentos más interesantes de la misma:
Termas de Torreblanca. Singular y especial es este yacimiento arqueológico pues permite conocer in situ una de las construcciones más significativas durante el Imperio Romano: las termas. En el año 1991 es cuando se descubrió dicho espacio que nos acerca a la costumbre que tenían dichos ciudadanos de utilizar estos baños públicos tanto para asearse como para realizar diversas actividades lúdicas.
Castillo Sohail. En una colina, sita próxima al río Fuengirola, es donde se encuentra situada esta fortaleza árabe que se construyó sobre una antigua edificación de origen romano. En concreto, fue en el año 956 cuando este castillo se puso en pie por orden del afamado Abderramán III.
Iglesia de Nuestra Señora del Rosario. El templo más importante que tiene la ciudad malagueña que nos ocupa es este donde llama especialmente la atención su fascinante portada barroca.
El yacimiento de la Finca del Secretario, donde se pueden admirar construcciones romanas como termas y una factoría de salazón, es otro de los monumentos más especiales de Fuengirola. Este merece ser visitado y también algunos de los edificios representativos de la arquitectura contemporánea como sería el caso de los Apartamentos Ópera.
