Irlanda es un país único, gran isla que pese a estar históricamente a la sombra del Reino Unido, siempre ha mantenido una personalidad y tradiciones propias. Aquí llegan además cientos de vuelos last minute a la semana, por lo que cualquier época es buena para visitarla.
Además, si Irlanda algo ha enseñado al mundo en lo que el ocio se refiere, esto se llama sin duda el día de San Patricio.
Patricio, se supone, oyó la voz de Dios que le decía que ya era tiempo de dejar Irlanda, por lo que escapando de los raptores que le tuvieron detenido durante seis años, consiguió llegar a su casa. En su hogar volvió a tener otra visión, en esta ocasión se trataba de un ángel que le dijo que tenía que regresar a predicar el cristianismo a los irlandeses. Después de pasarse nada menos que 14 años estudiando sacerdocio, Patricio regresó a Irlanda y en ella construyó varias iglesias y expandió la religión cristiano durante 30 años, día en el que murió, es decir, el 17 de marzo del año 460 de nuestra era.
Esta es la leyenda de San Patricio, santo que da a los irlandeses la escusa perfecta para pasar unos cuantos días de una fiesta sin fin. Este año, el día (o el festival) de San Patricio se celebrará del 12 al 17 de marzo en Dublín.
Suele ser una fiesta que se celebra por todo lo alto con diversas actividades como música, teatro en las calles, carnavales y hasta, nada menos que 4000 artistas que animarán el ambiente en la calle. Como parte del festival en Limerick se organiza también el SkyFest, es decir, una muestra gigante de fuegos artificiales sobre el río Shannon y que acaba con el SpringFest.
En Galway la fiesta se celebra de una forma curiosa, a saber, con el Walking Parade, es decir, artistas que participan en el denominado desfile de senderismo. En Armagh y Down es donde se celebra la fiesta de San Patricio más grande de Irlanda del Norte, aunque Belfast tampoco queda atrás pues se convierte en una ciudad carnavalera para la ocasión.
En fin, Irlanda entera se convierte en una gran fiesta en honor a este santo que, la verdad, suele ser la escusa perfecta para olvidar la pena del día a día y mojarse de todo tipo de licores.
Foto Vía: Willamor Media