Brujas, una maravilla medieval en Bélgica

Brujas, una maravilla medieval en Bélgica 2

 

Uno de los mejores destinos que podemos encontrar buscando billetes de avión baratos es Bélgica, y dentro de Bélgica Brujas, uno de los rincones más espectaculares, románticos, de cuento e interesantes de todo el continente. Y es que Brujas, como su nombre indica, es un pueblo tranquilo pero misterioso, con algo de magia que lo hace ser diferentes, incluso más que en un pueblo de brujas nos sentimos en un cuento de hadas donde todo es como armónico y perfecto.

Además, Brujas se ubica a tan sólo una hora en tren de Bruselas, por lo que si hemos ido de visita a la capital belga podemos cogernos un día libre de la capital y visitar este hermoso rincón de Bélgica.

La magia de Brujas tiene su origen hace unos 800 años, cuando la localidad era la gran capital del Condado de Flandes y una de las referencias comerciales de toda Europa. Aún hoy podemos ver las «secuelas» de dicha fama e importancia, y es que Brujas está lleno de monumentos y tesoros de gran valor artístico. Lo primero que nos encontraremos serán las murallas y torres que esconden una ciudad medieval prácticamente intacta, donde ni los coches tienen permiso a estropearlo. Lo mejor es visitar Brujas a pie y combinarlo con un pequeño paseo en barca por los mismos canales que ya hacían circular el agua en la Edad Media.

La Plaza Mayor o Grote Markt actúa como centro o corazón de Brujas, espacio donde podremos ver la impresionante fachada del Palacio Provincial, el salón de los tejidos o el gran monumento que se conoce como Atalaya, mole que es símbolo de la autonomía y libertad de Brujas.

En cuanto a la arquitectura religiosa, en Brujas también hay mucho que ver. Por ejemplo es recomendable visitar la Basílica de la Santa Sangre, levantado en el siglo XII y ubicado en el fortín. Llama la atención esta iglesia por que conserva una de las reliquias más importantes de Bélgica, a saber, la Santa Sangre de Jesucristo. Otras dos edificiaciones religiosas que también merece la pena ver son la Iglesia de Nuestra Señora (con la torre de ladrillo más alta de la ciudad) y la Catedral de San Salvador, la parroquia más antigua de la ciudad.

Por otra parte, no podemos irnos de Brujas sin haber visitado el tranquilo Beaterio, una reminiscencia y ejemplo de la Edad Media en el centro de la ciudad.

Foto Vía: Gonmi