El Monasterio de Tatev en Armenia

Monasterio de Tatev

Desde el punto de vista turístico, tal vez Armenia no sea un país excesivamente conocido. Es más, apuesto a que no hay mucha gente que lo sepa colocar en el mapa. Sin embargo, es un lugar realmente sorprendente, tanto por su cultura como por su historia. Algunos de sus principales monumentos son sencillamente fascinantes y encierran una magia sobrenatural. Es el caso precisamente del Monasterio de Tatev, uno de los cuatro lugares más espectaculares de Armenia.

Los otros tres son también monasterios, los de Sanahin, Hajpat y Noravank. Sin embargo, el que hoy nos interesa es este de Tatev, situado a más de 1.600 metros de altura, en la parte superior de un promontorio del profundo desfiladero del río Vorotan, en el sur del país. Para llegar hasta aquí puedes echarle un vistazo a la mayor selección de viajes online al mejor precio que puedes encontrar aquí.

Fundado en el siglo IV como un templo pagano, este Monasterio de Tatev fue creciendo y ampliándose con el paso del tiempo hasta ser completamente saqueado y devastado en los siglos XIV y XV. No sería sino hasta la segunda mitad del siglo XX cuando fuera restaurado en parte para que hoy podamos ver algunos de sus principales edificios. En estos trabajos de restauración se construyó incluso un teleférico desde el pie del acantilado, en el pueblo de Halidzor, hasta el monasterio.

Este teleférico, con una distancia de 5,7 kilómetros, es el más largo del mundo sin paradas intermedias. Este recorrido se suele hacer en poco más de diez minutos y, si bien es espectacular por las impresionantes vistas de las que se disfrutan, lógicamente no es muy recomendable para la gente que sufra de vértigo. Una vez arriba, el monasterio en sí es realmente espectacular, por lo que a nadie le resultará nada extraño que sea una de las principales atracciones turísticas de Armenia.

Tatev fue uno de los grandes centros políticos, económicos, culturales y espirituales del sur de Armenia. En la época medieval albergó una de las universidades más prestigiosas de la zona del Cáucaso, y hoy se ha convertido en un destino fundamental de peregrinación para los armenios. Cada uno de sus edificios está lleno de pequeños detalles, pero es tal vez su increíble ubicación, justo al borde de la quebrada y rodeado de montañas, lo que lo hacen tan espectacular.

En la zona podemos contemplar hoy, por ejemplo, la columna oscilante Gazaván, erigida a principios del siglo X y que presenta una curiosa particularidad: ante cualquier movimiento sísmico e incluso con un empujón se inclina levemente para volver luego a su posición. Algo que ocurre desde que se construyera.

Un lugar, pues, sencillamente mágico y en donde se disfruta de una paz inmensa.

Foto Vía People of Ar