No os dejéis llevar por los modernos rascacielos de la capital de Panamá. Porque, como toda ciudad caribeña, tiene un pasado colonial que aún pervive. Sí, ese pasado colonial que la hace pintoresca, sugerente, elegante y llamativa dentro de su gama de colores. El centro histórico de Panamá, a orillas del mar, es uno de los más bonitos del Caribe.
Realmente es un rincón de la ciudad que no tiene pérdida alguna. Tened el mar siempre como símbolo de referencia, y así os podréis mover mejor por él. Su laberinto de callejuelas guarda una mezcla muy interesante de viejas iglesias, conventos y edificios de todo tipo. Si tenéis reservados vuestros vuelos Panamá, seguro que os encantará.
Los turistas tal vez prefieren pasear a lo largo del hermoso Malecón, con vistas al mar y al barrio colonial. Es una pena que el paso del tiempo no tenga piedad de esta ciudad, ya que muchos de sus edificios viven hoy en ruinas. Aún así, desde 1997, Panamá es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Porque Panamá, fundada en 1519, es el asentamiento europeo más antiguo bañado por el océano Pacífico. Rápidamente tuvo que ser amurallada ante el constante acoso de piratas y corsarios. Tanto es así, que en el siglo XVII fue destruida por el pirata Henry Morgan, lo que la llevó a tener que ser reconstruida en ese mismo siglo bajo trazado español.
Ese es precisamente el trazado que hoy se conserva, con edificios como el Palacio Municipal o el Teatro Nacional, que se levanta en el lugar que antes podía verse el Convento de las Monjas de la Concepción.
De los edificios más vistosos de Panamá tenemos la Catedral Metropolitana, que se sitúa en la Plaza Mayor, también conocida como Plaza de la Independencia. Tiene una curiosa mezcla de estilos, ya que su fachada es colonial y sus torres campanario son neoclásicas. Fijaros precisamente en el remate de estas dos torres, hechos con concha de nácar, lo que le da un toque muy elegante.
No os marchéis de Panamá sin al menos haber visto el Museo de Historia de Panamá y el Museo de Arte Religioso, posiblemente los dos mejores de la ciudad. Como última joya, para la caída de la tarde, os recomiendo asomaros a la Punta Chiriquí, desde la que se tienen las mejores puestas de sol de Panamá.
Un lugar curioso, colonial, lleno de color este centro histórico de Panamá. Si queréis un viaje exótico, lleno de historia, naturaleza y animación, bien podría ser este que os proponemos, ¿verdad?.
Foto Vía Lead Travel