Cuando estás frente a la Catedral de Colonia creo que te olvidas de todo durante un instante. Hay un preciso momento de la visita en la que sólo llegas a poder preguntarte cómo diablos pudieron llegar a hacer algo semejante. Colonia merece la visita aunque tan sólo tuviéramos en mente visitar esta maravilla de la arquitectura.
Y claro, después de ir en nuestros vuelos Colonia, habrá que subir a la torre de la catedral, ¿no?. Primero porque es una de las torres catedralicias más altas del mundo, y segundo porque las vistas desde allí deben ser fascinantes. Son 157 metros de altura los que tenemos que subir para llegar a la cima. ¿Seremos capaces?. Claro que sí…
La entrada para subir a la torre de la Catedral de Colonia se encuentra fuera de la propia catedral, en uno de sus laterales. Os recomiendo que la subáis tempranito por la mañana, para encontraros solamente turistas que van de subida. Es un poco lioso por la estrechez de las escaleras el ir parándonos poco a poco para dejar que pasen los que vienen bajando.
Os puedo asegurar que las escaleras de caracol hacia arriba se os harán interminables. Pero no penséis en eso, porque será peor. En la subida os recomiendo ir tranquilos, hay tiempo. Hemos pagado poco más de cuatro euros, y no es plan de ir corriendo, porque jamás llegaríamos. Las vistas desde las alturas lo merecen.
¿Recomendaciones?. Pues ir con ropa cómoda, nada de zapatos de tacón, porque no creo que lleguéis. Tampoco subir con mucho aparejo de mochilas ni demás, cuanto menos peso mucho mejor, tanto por el cansancio como por el hecho de que las escaleras de caracol son bastante estrechas, y como tengamos que cruzarnos con algún turista que baja…
Poco antes de llegar a la cima está la campana de la Catedral de Colonia, una de las más grandes del mundo, por otra parte. Desde aquí ya se pueden tener unas vistas maravillosas de Colonia, aunque seguro que intentaréis seguir para llegar a la cima.
En este último de tramo de escaleras os tengo que reconocer que lo pasé un poco mal. Precisamente tengo algo de vértigo, y las escaleras aquí son de rejilla, no de piedra, por lo que puedes ver la parte de abajo. Con mirar hacia adelante e ir con cuidado no pasa absolutamente nada.
Una vez arriba ya puedes disfrutar de las mejores vistas de Colonia.
Foto Vía Skyskrapercity