Salamanca es de esas ciudades imprescindibles de España. Fue declarada Patrimonio de la Humanidad hace ya más de veinte años y más tarde Capital Europea de la Cultura, y es que sus atractivos no se limitan a un impresionante patrimonio histórico y cultural, sino que también posee un interesante ambiente cultural y de ocio gracias al Campus Universitario. Es decir que si no sabemos que hacer este puente de diciembre, ya podemos ir alquilando una habitación en uno de los hoteles en Salamanca.
Además, la ciudad ha sabido crecer aprovechando estas ventajas. Tal como ocurrió con las Edades del Hombre, o más recientemente con la celebración de los hermosos primeros 250 años de la construcción de la Plaza Mayor de la ciudad y de la XV Cumbre de Jefes de Estado Iberoamericanos han hecho que esta ciudad acoja una fama no solo estatal sino que su belleza es internacionalmente reconocido.
Es la ciudad del pensamiento, de la belleza, de encuentros y saberes que siempre se mantiene abierta, con los brazos abiertos al visitante. Lo podremos comprobar en una primera incursión en su casco histórico, donde los monumentos de diferentes estilos arquitectónicos nos invitarán a entrar a descubrir sus entrañas. También es seguramente una de las capitales españolas de la arquitectura religiosa.
Aquí podremos disfrutar de grandes lugares de espiritualidad como la Catedral vieja y su aroma románica y hermosa; de la Catedral nueva con su espectacularidad gótica; del templo de Santo Domingo, dominica y gótica y, por último la Clerecía, de estilo barroco y jesuítica. Además, posee también otros pequeños espacios alejados del ruido, íntimos, pero bellos y relevantes, lugares que también forman parte de esta hermosa ciudad.
En fin, edificios religiosos y civiles construidos con la piedra de Villamayor, esa piedra arenisca que le da ese color dorado y una personalidad especial a los edificios salmantinos. La mayor parte del importante patrimonio histórico artístico de Salamanca se concentra dentro de la antigua muralla medieval, que aún conserva varios tramos, lo que hace posible que el itinerario o el paseo por el casco histórico sea muy cómodo de realizar, ya que el visitante puede recorrer a pie todas las rutas.
En fin, la conservación y puesta en valor del patrimonio es uno de los grandes e imprescindibles retos del Turismo de Salamanca, que ha abierto al público interesantes rutas e interiores patrimoniales espectaculares.
Foto Vía: Julien Navarro