Ragusa, la ciudad del barroco en Sicilia

Ragusa

Los valles de la Cava San Leonardo y Cava Santa Domenica rodean la colina de piedra caliza sobre la que se asienta la ciudad siciliana de Ragusa. Situada cien kilómetros al suroeste de Catania, forma parte del Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO junto a otras siete ciudades del barroco tardío de Val di Noto.

El estilo barroco que empapa las calles, plazas y edificios de Ragusa se debe a la reconstrucción realizada en la ciudad tras el terrible terremoto de 1693 que asoló toda la zona. Desde entonces su centro histórico ha sido conservado perfectamente, por lo que supone un placer pasear por él. Si tenéis pensado reservar vuestros cruceros en Navidad y tenéis ocasión de visitar Sicilia, os recomiendo la excursión hasta Ragusa.

Ciudad tranquila y relajada, como muchas otras de esta isla, a nuestro paseo por el casco viejo le irán sucediendo diversos monumentos de interés. Entre ellos el Palacio de la Cancillería, la Iglesia de Santa María dell’Idria, la Iglesia del Purgatorio, el Palacio de Arezzi, el de Donnafugata y, por supuesto, la Catedral de Ragusa, posiblemente uno de los edificios barrocos más imponentes de toda Sicilia.

Resulta curioso leer la historia de Ragusa tras el terremoto de 1693. La ciudad quedó prácticamente destruida, pero también dividida entre sus ciudadanos. Los más ricos e influyentes quisieron construir una nueva Ragusa en la parte alta de la colina, la que hoy se conoce como la Ragusa Superiore. El resto de la población decidió reconstruir lo que había sido derribado, la Ragusa Ibla, la que hoy en realidad es la zona más turística y con más encanto.

Hoy se puede apreciar perfectamente el amor con el que sus lugareños reconstruyeron Ragusa. A sus calles, plazas y edificios no les falta ni un solo detalle. Impresionante la cúpula de la Basílica di San Giorgio o la Iglesia de Santa María de las Escaleras, cuyo nombre le viene por los casi 250 escalones que hay que subir para llegar hasta ella.

El último detalle de nuestra visita lo dejamos para que subáis hasta la Ragusa moderna. Allí el encanto estriba en los miradores hacia el casco antiguo. Tal vez estemos ante uno de los mejores balcones barrocos de Europa.

Foto Vía Estilo ETC