No sé si habéis estado alguna vez en la ciudad norteamericana de Seattle. Si no es así, yo que vosotros la apuntaba en vuestra lista de próximos destinos, ya que resulta una pasada. En Seattle tenéis de todo, desde una riqueza natural exhuberante, hasta grandes monumentos históricos. Hay muchos vuelos Seattle que os pueden llevar hasta aquí.
En primer lugar podéis pasaros por Pike Place Market, uno de los mercados de alimentos más antiguos de Estados Unidos. Cuenta con 600 puestos en los que ya no sólo se venden alimentos, sino que también veréis antigüedades y artesanías. Además de sus puestos, en la zona hay más de 60 restaurantes para comer en Seattle.
El barrio más antiguo de Seattle es Pioneer Square, compuesto de 17 bloques de pisos de más de cien años de antigüedad. De todas maneras, son edificios que se han restaurado recientemente, y hoy albergan galerías de arte, oficinas, tiendas y cafés. Es uno de los mejores lugares para salir de noche en Seattle, con bares y tabernas de música.
Si viajáis con niños nada mejor que una visita al Seattle Aquarium, para ver muchas especies marinas del Pacífico noroccidental. Cada día también hay tres espectáculos de buceo. También podéis llevarlos al Parque Zoológico Woodland, el segundo mejor de Estados Unidos tras el de Nueva York. Aquí viven 300 especies de animales.
En Seattle podéis ver uno de los edificios más grandes del mundo, el Boeing Tour. Imaginaros que en su interior veréis diferentes estados y piezas de montaje de los famosos aviones Boeing. De allí podemos pasar al Parque Histórico Nacional de Klondike, en donde conocer la historia de la minería del oro de Seattle.
Símbolo de la ciudad es el Seattle Space Needle, una torre de casi 200 metros de altura. Fue construida en 1962, y desde ella ya os podéis imaginar las vistas que se pueden tener de toda Seattle. En el interior de la torre podéis comer en el Restaurante SkyCity, casi en la cima, un restaurante que rota para poder ver toda la ciudad.
Seattle Center es otro de los lugares que alberga muchas visitas al cabo del día, ya que se trata de un complejo que albergala Ópera de Seattle, el Key Arena o el Seattle Repertory. Además veréis la célebre Fuente Internacional, con sus chorros de agua musicales, la Campana Kobe o el Pabellón Fisher.
Por último os recomendamos la visita al Monte del Parque Nacional Rainier, que alberga un volcán activo con 35 kilómetros cuadrados de nieve e hielo. En este parque veréis valles, cascadas, praderas y bosques. Un lugar sensacional para terminar nuestra visita a Seattle.
Foto Vía Kevin Mcneal