¡Qué recuerdos de una ciudad como Budapest!. Hay tantas cosas por ver y hacer en la capital húngara que resulta cuanto menos difícil elaborar una pequeña lista sobre todo aquello que podemos disfrutar en la ciudad. Sin embargo, hay algunas que son totalmente imprescindibles, por eso os las citamos.
Si reserváis vuestros vuelos Budapest, una vez en la ciudad nada mejor que ir a la estación de metro de Vorosmarty, la segunda línea de metro más antigua tras la de Londres, llena de tiendas, restaurantes y todos los souvenirs que queráis. Una magnífica opción es tomar un goulash o una sopa de pollo en las terrazas de los cafés.
Después de comer e ir de compras, podemos relajarnos en los baños termales de Budapest. Hay muchos en la ciudad, llegados sobre todo por la influencia turca en Hungría. Hablando de aguas, qué mejor que tomar un pequeño crucero por el Danubio, que bien puede ser un paseo nocturno, con cena incluida, o un viaje más largo hasta Viena o Bratislava.
En este crucero veréis el famoso Puente de las Cadenas, el primer puente construido en Budapest sobre el Danubio. Data de 1849 y resulta imprescindible cruzarlo a pie contemplando las vistas.
En Budapest resulta imprescindible subir en funicular hasta el Castillo de Budapest. Se trata del segundo funicular más antiguo del mundo, un lugar increíble para echar unas fotos de la ciudad mientras ascendemos a la colina de la fortaleza.
Otras visitas que debéis hacer son a la Iglesia de San Matías y al Bastión de los Pescadores, ambas en la zona del Castillo de Buda. El Bastión parece un castillo de cuento de hadas, lleno de torres, construido hace unos cien años. Seguir paseando por la zona del castillo, considerada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Precisamente cerca del castillo se halla el Laberinto, una sucesión de cuevas que también resultan bastante interesantes.
Seguimos con las visitas en Budapest para conocer el edificio del Parlamento Húngaro, el tercero más grande del mundo. En su interior se halla la Corona de San Esteban, construida en estilo neogótico a finales del siglo XIX. Por último, nada mejor que visitar el Museo Nacional Húngaro y el Museo de Historia de Budapest.
Para hacer todo esto váis a necesitar entre dos y cuatro días, así que planificar bien vuestro viaje. Haceros con un buen mapa de metro de Budapest para poder bajaros en las estaciones de los lugares más interesantes. Hay tantas cosas por hacer en esta ciudad tan maravillosa…
Foto Vía Islamic Tourism