A la hora de salir de viaje siempre nos ponemos a meter cosas en la maleta, para por si llueve, para por si sale el sol, para por si hace frío y luego hace calor… La cuestión es que vamos llenando poco a poco nuestra maleta de cosas que seguramente luego no vayamos a utilizar. Esto se agrava a la hora de elegir el calzado para nuestro viaje. Que si uno cómodo para pasear, que si otro más fuerte por si hacemos alguna excursión, que si este otro para ir un poco más monos o monas.. En definitiva, llenamos la maleta de un gran número de cosas para luego usar la mitad.
En el tema del calzado lo suyo es elegir uno cómodo, que nos haga la función de un todo en uno, más aún si nuestro viaje es en plan mochilero ya que utilizaremos ese calzado para prácticamente todo el viaje.
En este sentido, usar un calzado tipo Panama Jack o algo por el estilo nos puede ayudar a ahorrar mucho sitio en nuestra maleta que lo podemos aprovechar para otras cosas. Con un buen calzado de este tipo nos aseguramos que nos dure todo nuestro viaje y que se adapte a todas las necesidades que tengamos a lo largo de este. Ten en cuenta que si tu intención es coger la mochila y recorrer una zona, un país o una región tendrás que adaptarte a diferentes medios.
También es importante que tu calzado no sea nuevo y que lo hayas usado ya unas cuantas veces con anterioridad. De esta forma te evitas posibles heridas que muchas veces salen al utilizar un calzado nuevo.
En ocasiones, un calzado de este tipo puede resultar algo caro pero a la larga, si lo usas a diario en tu viaje, te saldrá rentable y te asegurarás que te dure.