Playas en Lima

Playas en Lima 2

Posiblemente todos aquellos turistas que viajan a Perú lo hagan atraídos por el encanto mágico de Macchu Pichu y la arquitectura colonial de Lima, la capital del país. Sin embargo, Perú tiene muchos otros atractivos que iremos descubriendo poco a poco. Hoy nos quedaremos cerca de su capital, con la intención de visitar y conocer las mejores playas de Lima.

En verano los limeños buscan el frescor de sus playas. Si tenéis reservado vuestros vuelos baratos para la temporada estival hasta aquí, os vamos a recomendar algunos lugares de descanso. Muchas agencias de viajes os aconsejarán cualquier punto de la costa limeña a lo largo de Miraflores, Barranco o San Isidro, pero lo mejor está en la zona sur de la capital, bordeando la carretera Panamericana.

A poco de pasar las ruinas pre incas de Pachacamac, al sur de Lima, comienzan a sucederse una serie de pequeños pueblos costeros. Estamos a unos cincuenta kilómetros al sur de la capital, tal vez un poco alejados, pero lejos del bullicio de las playas cercanas. Cerca de Pachacamac tenemos la Playa de San Pedro y la Bahía del Silencio, con muchos restaurantes a su alrededor.

Diez minutos más al sur de la Bahía del Silencio y sus acantilados tenemos Punta Hermosa, donde destaca la Playa de Santa María, ideal para los amantes del surf. En esta playa tenéis una gran cantidad de hoteles y apartamentos. Un poco más allá está el tranquilo pueblo de pescadores de Pucusana, a unos 75 kilómetros al sur de Lima, que alberga la Playa de Chilca y sus piscinas naturales.

Si queréis ir más al sur hay muchas más playas, como las de Puerto Viejo, las Totoritas, Bjuama, Cerro Azul y Canete. Yo os recomiendo principalmente el sur de Lima, ya que al norte las playas no son tan atractivas. La única excepción podría ser la Playa de Ancón, situada a unos cuarenta kilómetros al norte de Lima, puerta de entrada de las Lomas de Ancón, una reserva protegida.

Y, una última consideración: recordad que en Perú los veranos se suceden entre los meses de diciembre y abril, ojo.

Foto Vía Wikivisual