Peñíscola, la ciudad del Papa Luna

Peñíscola, la ciudad del Papa Luna 2

Peñíscola es una preciosa ciudad ubicada en plena costa de la provincia de Castellón, que comparte el espíritu mediterráneo y turístico con una naturaleza de gran atractivo, gracias a las espléndidas vistas que ofrece y también a los parajes naturales que la rodean hacia el interior. El mayor atractivo de la población es, sin duda, su particular configuración geográfica: una roca unida al continente por un estrecho istmo. En esta zona, la más antigua de la ciudad, se encuentra el castillo-fortaleza en el que residió el Papa Benedicto XIII, construido en el siglo XIV y que se eleva hasta 64 m sobre el nivel del mar, ofreciendo imágenes espectaculares desde las playas más próximas, especialmente con su iluminación nocturna.

El castillo, de origen templario y edificado sobre una alcazaba árabe preexistente, destaca por su solidez e imponente aspecto. Cuenta con atracciones como el Parque de Artillería, actualmente un jardín botánico, las murallas, sobre todo su sección renacentista, los portales (Portal Fosc, puerta de Sant Pere y puerta de Santa María) y la Ermita de Santa Ana.

Además, la ciudad cuenta con instalaciones culturales como el Museo de la Mar, dedicado al patrimonio marinero de la ciudad, fundamentalmente a su historia, arqueología, pesca y fauna marina, y la Casa del Ayer, que muestra una vivienda tradicional tal y como era en el s. XIX, con objetos antiguos y todos los utensilios de la época.

Los hoteles de Peñíscola nos garantizan una estancia agradable y asequible, pudiendo servirnos de base, además, para realizar excursiones por el Parque Natural de La Serra d’Irta, ejemplo de naturaleza del más típico carácter mediterráneo, junto a joyas patrimoniales como el Castillo de Xivert, o por la marjal, un humedal de alto valor ecológico, ejemplo de la armonía entre la actividad humana y la naturaleza, último reducto de especies acuáticas como el Samaruc y  el Fartet.

Foto: Gabriel Villena