Si estamos en Londres y deseamos visitar sus alrededores, recomendamos la ciudad universitaria de Oxford. Es un destino perfecto en viajes baratos porque presenta paisajes ingleses muy bellos.
Las protagonistas de esta pequeña urbe son, sin duda, las universidades. Las vemos en cada esquina y en cada calle, siendo edificios realmente históricos con una arquitectura definida y muy particular.
Tanto estas como los populares colleges agrupan a muchos estudiantes durante todo el año, por lo que la media de edad es relativamente baja. La mejor forma de moverse por Oxford es a pie o en bicicleta, algo también puramente inglés que aquí se estila mucho. También existen algunos autobuses para desplazarse algo más rápido.
La Universidad de Oxford es la madre de todas. Grande, amplia, con muchas facultades, puede ser visitada tanto por dentro como por fuera para saborear la vida estudiantil de este lugar y admirar un edificio que es casi como un museo por su gran importancia histórica.
Los jardines son también muy frecuentados. Así abundan los parques donde estudiar, descansar, jugar algún deporte o tomar algo tras las clases. La ciudad es como un pequeño cuento que hemos podido ver en series y películas y gusta a todos los turistas que deciden pasar un fin de semana.
La ventaja es que está muy cercana a la City, a Londres, a la que llegar en tren. Además de estos potentes monumentos y museos, Oxford es una ciudad moderna cargada de tabernas a cuál más famosa.
Aquí se juntan los estudiantes por la tarde, la noche o en fines de semana. Las tabernas son totalmente imprescindibles en toda Inglaterra y se convierten en lugares donde tomar cerveza mientras podemos cenar típica comida inglesa. Algunas son históricas y muy populares, y muchas veces se realizan conciertos en directo con música de la región.
Foto: tejvan
