Museos en Andorra

Museos en Andorra 2

Quien piense que Andorra es un país para visitar únicamente en invierno, se equivoca profundamente. Los hoteles en Andorra funcionan a pleno rendimiento también en verano, y es que el “País de los Pirineos” ha sabido adaptar su oferta turística más allá de las estaciones de esquí invernales. Uno de los ejemplos más significativos de esta variedad de oferta turística son sus museos, que muestran sus exposiciones tanto en invierno como en verano y que perfectamente pueden añadirse a su belleza paisajística al escoger Andorra como destino de nuestras vacaciones.

Por ejemplo, podemos visitar el Museo del Tabaco en Sant Julià de Lòria, que responde a una antiquísima tradición histórica de Andorra (y desconocida para la mayoría) y que a través de varios multimedias nos explican los diferentes procesos que posee la elaboración del tabaco. El museo se encuentra ubicado en una antigua fábrica de tabaco.

Si estamos en la capital del Principado, en Andorra la Vella, podemos visitar la Casa de la Vall, sin duda uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad y sede del Consell General de Andorra, dicho de otro modo, el Parlamento del pequeño país. Es el parlamento más pequeño de Europa y la visita de su edificio merece la pena para conocer el peculiar e interesante sistema político del pequeño país.

Otro de los museos que podemos visitar en Andorra es el Museo de la Electricidad, situado en Escaldes-Engordany. Aquí podremos conocer las características de la energía hidroeléctrica, la más importante de Andorra. En el mismo municipio podremos visitar el Centro de Arte de Escaldes- Engordany, donde se reserva un pequeño espacio a la cultura y dos colecciones permanentes. Por un lado la dedicada a la obra del escultor Josep Viladomat y por otro lado la exposición que nos enseñará las delicias del arte románico de Andorra.

En fin, el Principado de Andorra posee otros muchos museos relacionados con industrias locales o artes populares y formas de vivir de este pequeño país de los pirineos. La mayoría de ellos merecen la pena, ya que nos enseñan cosas particulares que posee uno de los países más pequeños de Europa.

Foto Vía: lorentey