El hecho de que esté catalogada como Patrimonio de la Humanidad, ya deja patente que Segovia es una de esas ciudades que merece la pena visitar al menos una vez en la vida. Y es que posee una riqueza y una belleza monumental que son difíciles de igualar. Por eso, te recomendamos encarecidamente que no dudes en realizar una escapada a la misma.
En ella encontrarás una amplia red de monumentos de gran valor, no obstante, aquí te damos a conocer aquellos que destacan por su singularidad y cuya visita se convierte en obligatoria:
Acueducto. Ya que es el símbolo de la urbe es impensable estar en dicha tierra y no conocerlo in situ. En la Plaza del Azoguejo es donde se encuentra situada dicha construcción del siglo I que tiene el privilegio de ser la edificación romana más importante que existe en España.
Catedral de Santa María. “La Dama de las Catedrales” es también como se conoce a este templo del siglo XVI que no sólo es conocido por ser la última catedral gótica que se erigió en el país sino también por ser una auténtica joya dentro de este estilo vasco-castellano.
Alcázar. Una de las edificaciones más singulares y emblemáticas de Segovia es esta, que se edificó en el año 1122, pues recuerda enormemente a los castillos medievales centroeuropeos. Tal es la belleza que tiene que parece ser que la factoría Disney se inspiró en ella para una de sus películas, en concreto, para crear la fortaleza en la que vivía la Cenicienta. Su foso, su torre del homenaje, su puente levadizo o estancias como la Sala del Trono son algunos de los rincones más especiales que tiene el citado Alcázar.
Monasterio de San Antonio el Real. En el siglo XV fue cuando se construyó este conjunto arquitectónico de estilo gótico que tiene su origen en un antiguo pabellón de caza del que fuera monarca Enrique IV. Sus techos mudéjares son unos de sus principales atractivos.