No hay mejor forma que visitar un lugar recorriendo con de punta a punta con un coche. Mallorca es un isla infinita que esconde calas de mar azul intenso donde perderse. Recomendamos ir a un alquiler de coches baratos y aprovechar al máximo tu escapada.
Como vemos, en Mallloca no hay lugar para el aburrimiento. Y el coche nos permite llegar antes a las poblaciones cercanas, cada una con una peculiaridad propia que la hacen especial, como toda ella.
De entre los diversos lugares de mayor interés, destacamos pasearnos por Pol·lèntia, en Alcúdia, ubicada en el norte de Mallorca, la única ciudad romana que se puede visitar actualmente en la isla. Pol·lèntia, que significa ‘poder’, fue fundada por Quinto Cecilio Metelo en el año 123 a. C. sobre un antiguo poblado talayótico.
Valldemossa es un bonito pueblo con hermosas calles y plazas, digno de ser visitado. Es famoso porque allí estuvo mucho tiempo el compositor polaco Frédéric Chopin. El artista se alojó en la Real Cartuja, que tiene sus orígenes en el palacio construido por el rey Jaume II para su hijo Sanç a principios del siglo XIV.
Son Marroig, en Deià, es otro lugar a tener en cuenta. Destaca por su hermoso paisaje y sus calas, algunas de ellas personales. Como es habitual en muchos pueblos de la isla, encontramos palacios y residencias de ilustres personajes de la aristocracia. Un ejempo es la antigua residencia en Mallorca del Archiduque Luis Salvador de Austria.
De palacios a castillos. Las fortificaciones también abundan en Mallorca. El castillo de Capdepera es un magnífico un recinto fortificado del s.XIV, en cuyo interior se conservan la capilla de la Mare de Déu de l’Esperança.
En Pollença podemos hacer multitud de cosas. El museo municipal de la población de halla en el convento de Sant Domingo, y en su interior alberga una colección de pintura contemporánea.
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