Al norte de Alemania, apenas a 65 kilómetros de Hamburgo, se halla la hermosa e histórica ciudad de Lubeck. Con su célebre Rathaus o Ayuntamiento, construido en el siglo XIII y considerado uno de los más antiguos y maravillosos del país germano, es un lugar perfecto para unas vacaciones a orillas del Báltico.
Su centro histórico, que se puede recorrer perfectamente a pie, está considerado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Con su paseo marítimo, a Lubeck se la conoce también como la ciudad del mazapán, ya que este producto se elabora aquí desde el siglo XIII. Resulta un placer pasear por el laberinto de callejuelas de su casco antiguo, rodeado de las viejas casas de los comerciantes medievales.
Todo el centro histórico es un compendio de edificios góticos, renacentistas, barrocos y clásicos. En la oficina de turismo de Lubeck os pueden organizar una ruta por todo el centro histórico que os llevará a conocer gran parte de las historias y leyendas de la ciudad. Precisamente este casco viejo está rodeado por el canal Elbe-Lubeck y el río Trave. Allí se pueden realizar incluso pequeñas excursiones desde el embarcadero de Obertrave.
Dentro de este centro histórico hay algunos edificios que no debemos perdernos, como el citado Rathaus o Ayuntamiento, el Castillo-Convento de Burgkloster, el barrio de Koberg que recrea a la perfección la vida de Lubeck en el siglo XIII, la Iglesia de Santiago, el Hospital del Espíritu Santo, la Iglesia de San Pedro, la Catedral de Lubeck y la Puerta de Holsten.
Para los amantes de la literatura, hay que decir que el célebre escritor Thoman Mann nació y se crió en Lubeck. En la ciudad ambientó una de sus obras más conocidas, Los Buddenbrooks. La casa en la que se desarrolla la acción era precisamente la casa de los abuelos de Thomas Mann. Hoy algunas de sus habitaciones están decoradas tal cual se narra en la novela. En la oficina de turismo de Lubeck se puede organizar una visita guiada a esta casa.
Una época muy bonita para visitar Lubeck es en Navidad, cuando en la Plaza Koberg se lleva a cabo, del 21 de noviembre al 23 de diciembre, el tradicional mercadillo navideño, uno de los más bonitos y pintorescos de Alemania.
Foto Vía Wolpy