Si estamos en Barcelona de turismo, sepas que hay muchas opciones para comer exquisitamente. La nueva cocina de vanguardia, los platos marineros, los ingredientes típicos catalanes y mediterráneos y todo ello en forma de tapa.
Elige entre los hoteles de Barcelona aquel que sea tu favorito y reserva una escapada llena de magia y buenos platos. En el barrio de Sarrià, el astro de las tapas y de las patatas bravas es el bar Tomàs, toda una institución que atrapa a toda clase de turistas, pues este pequeños establecimiento está en todas las guías internacionales. Tal es su éxito que muchas veces puedes quedarte fuera sin comer, así que ves prontito porque tampoco pueden hacerse reservas.
En el centro hay muchos bares de tapas, pero no todos valen. Tapas 24, en plena eixample, también es un lugar pequeño, pero con aires más modernos. Las tapas se dividen entre clásicas (de toda la vida) y aquellas algo más especiales, o de autor, con el sello personal del conocido chef Carles Abellan
Cambiamos de zona porque aunque el centro es eje de muchos bares, en Les Corts, el restaurante Casa Lolo es una auténtica típica casa de tapas que evoca los locales andaluces, no sólo por su estética sino tambien por muchos platos de su carta. No te pierdas los quesos y los pescaítos.
De un extremo a otro. En la Barceloneta hay bares de tapas de lo más auténtico. El sabor marinero, por estar junto al mar, es un plus, y ofrecen los más variados platos de pescado, cáscaras, gambas… algunos son emblemáticos y llevan muchos años de historia repartiendo alegrías para los estómagos más entusiastas.
El borne es lugar de concentración por su oferta gastronómica. Las tabernas de tapas, especialmente vascas, llenas de pintxos, abundan en plazas y callejuelas. Ya sabes montaditos fríos y calientes, acompañados de sidra o cerveza.
Foto: wordridden