Más de 70 castillos históricos y ciudades medievales románticas pueden verse en la llamada Ruta de los Castillos, que discurre entre las ciudades de Manheim en Alemania, y Praga en la República Checa. Esta Ruta de los Castillos conecta muchas de estas fortalezas medievales, palacios barrocos, iglesias, ciudades románticas y un sinfín de casas de entramado de madera.
Aquellos que recorráis estas Ruta de los Castillos también podéis comer y/o dormir en auténticos castillos históricos convertidos en hoteles y restaurantes. Una amplia gama de eventos culturales también se desarrollan a lo largo del año, sobre todo en la época de verano, cuando se organizan conciertos y festivales en muchos de estos lugares históricos.
La Ruta de los Castillos es uno de los destinos turísticos más populares en Alemania. Sigue caminos y desvíos interminables, ya que la ruta enlaza Manheim con Praga. El trayecto tiene un total de 1200 kilómetros, y se atraviesa una hermosa campiña con castillos y lugares históricos. Y eso que las dos ciudades, por cualquier otra carretera, apenas están separadas por 500 kilómetros.
El coche es la mejor manera de recorrer la Ruta de los Castillos. El transporte público no cubre toda la ruta y los trenes están disponibles en muchas de las ciudades de la ruta. Manheim tiene estación de ferrocarril, mientras que otras ciudades como Heidelberg, Nuremberg, Bamberg, Bayreuth y Praga también cuentan con trenes de alta velocidad.
Los castillos son las atracciones más emblemáticas de la ruta. A lo largo de ella hay más de 70 fortalezas en buen estado. Sin embargo, hay muchos otros lugares de interés, entre los que se incluyen suntuosos palacios, ciudades históricas, impresionantes iglesias, edificios de madera, parques y una hermosa naturaleza.
Los mejores castillos que veréis serán los de Schloss Heidelberg, el de Burg Guttenberg, el Castillo Imperial de Nuremberg, el Burg Rabenstein, la Fortaleza Veste Coburg, la Festung Rosenberg en Kronach, el Hrad Loket en Elbogen y los castillos de Praga.
A lo largo de esta ruta también pueden verse numerosos palacios. Muchos fueron en su origen fortalezas medievales, para convertirse en el renacimiento y el barroco en suntuosos palacios. Manheim tiene el palacio barroco más grande de Alemania. Otros palacios se pueden ver en Ansbach, Bamberg, Coburg, Bayreuth, Kulmbach, Falkenau y Konigswart. Palacios con preciosos jardines se pueden ver en Helidelberg y Bayreuth.
Aparte de los castillos y palacios, hay muchos otros lugares interesantes por ver. Rothenburg ob der Tauber es posiblemente la ciudad medieval más famosa. Las pequeñas Wolframs-Eschenbach y Seblach, en la Franconia, son ciudades completamente rodeadas de murallas, y en general, atraen a un gran número de visitantes.
Además hay muchas otras ciudades históricas que en ocasiones se pasan por alto sin darnos cuenta. Entre ellas Bad Wimpfen, con los restos de la fortaleza Staufen, y Schwabisch Hall, con un antiguo monasterio benedictino. Casi todas las ciudades de la ruta cuentan con precioso edificios de entramados de madera. El casco histórico de Bamberg está considerado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO.
Muchos de los castillos y palacios de la ruta tienen restaurantes, y algunos se han convertido en hoteles. Estos hoteles no tienen porqué ser muy suntuosos o lujosos, por lo que muchos de ellos tienen precios muy razonables. A menudo, las tarifas son muy parecidas a las de un hotel normal. Con lo que la experiencia romántica es mucho más intensa, y a veces es bueno alojarse en alguno de ellos para poder visitar los demás.
Desde aquí os recomendamos el Hirschhorn Schloss Hotel, el Hotel Restaurante Burg Hornberg, el Hotel Burg Colemberg y el Hotel Burg Rabenstein. La Ruta de los Castillos es, como podéis ver, una de las rutas más atractivas que atraviesan Alemania. También la podéis encontrar bajo el nombre de la Ruta Romántica, que atraviesa los castillos desde la ciudad de Rothenburg ob der Tauber.
Foto 1: Vía Toeurope
Foto 2: Vía Tg Odenwald
