La Laguna de Huacachina en Ica, Perú

Laguna de Huacachina

Asociamos Perú con lugares tan conocidos como Machu Picchu, Lima o Cuzco entre otros. Sin embargo este país cuenta con otra serie de grandes atractivos que no podemos dejar de visitar. Para mí creo que solo Brasil podría compararse en cuanto a belleza, cultura e historia con el país peruano.

Hoy os quiero llevar hasta la ciudad de Ica, en el departamento del mismo nombre, 365 kilómetros al sur de Lima. A las afueras de esta población se encuentra nuestro protagonista, la Laguna de Huacachina, un verdadero oasis natural de casi 2.500 hectáreas en medio del desierto. Posiblemente sea el principal atractivo de esta ciudad y la excusa perfecta que tienen muchos turistas para visitarla. No en vano se organizan en ella actividades como esquí acuático, sandboard, alquiler de botes a pedales, 4×4, etc…

Rodeada de impresionantes dunas, la Laguna de Huacachina ofrece una vegetación exhuberante, casi reflejada en las aguas verde esmeralda de la propia laguna. Aquí crecen palmeras, eucaliptos y guarangos, lo que provoca que el paseo por la orilla resulte todo un placer para el visitante. Precisamente en junio pasado se declaró a esta laguna Zona Reservada con el propósito de conservar su diversidad biológica, cultural y paisajística.

A decir verdad el entorno es bien sencillo, pero tiene una magia especial. En algunas guías de viaje se la conoce como el Oasis de América, ya que la única vegetación que crece en los alrededores es la que se sitúa a los pies de la laguna. Todo lo demás es arena, dunas y desierto. Pero, claro, la magia le viene por algo más…

Cuenta la leyenda que la Laguna de Huacachina se originó gracias a la princesa incaica Huacca-China. Dicen que esta princesa cantaba de manera tan maravillosa que, todos los que la oían, se ponían a llorar sin remisión. Tanto es así que un cazador se enamoró de ella y la persiguió para secuestrarla. La princesa huyó con un espejo en su mano entre las dunas del desierto, de suerte que tropezó, cayó al suelo, y el espejo se convirtió en la laguna.

De esta manera la princesa se convirtió en sirena y se lanzó al agua. Desde entonces los lugareños afirman que de noche, en los alrededores de la laguna, se oye el canto de la princesa.

Sea cierta o no la leyenda, lo que sí es verdad es que estamos frente a uno de los principales destinos turísticos de Perú. Un lugar que desprende algo diferente y peculiar.

Foto Vía Sorteo Premios