El Teatro de Broadway en Nueva York

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De día y de noche, eso de que Nueva York es la ciudad que nunca duerme no es ni una exageración ni un cuento chino. Pasaros por cualquiera de las grandes avenidas de la ciudad a cualquier hora. Nunca la veréis alejada de sus luces de neón, su tráfico intenso, el bullicio de la gente… Nueva York, además de edificios históricos y rascacielos, es la ciudad del ocio, la diversión, el ambiente.

¿A quién sino se le viene ahora a la imaginación un lugar tan emblemático como el Teatro de Broadway?. Si tenéis reservados vuestros vuelos baratos a Nueva York este lugar es de visita imprescindible. Aunque, eso sí, no confundáis el teatro con el barrio de Broadway. Porque en el distrito puede haber más de cuarenta salas de fiesta, no es entonces el Teatro de Broadway el único lugar de espectáculos de la zona.

El Teatro de Broadway tiene capacidad para unos 1.700 espectadores. No parece mucho para la fama que tiene, pero aún así sigue siendo uno de los teatros más espectaculares del mundo. Todos los grandes actores y actrices de la escena han pasado por aquí. Actuar en Broadway es sinónimo de prestigio en el currículum de cualquier artista.

El Teatro Broadway en sí fue diseñado por el arquitecto Eugenio de la Rosa e inaugurado el 25 de diciembre de 1924, bajo el nombre de Teatro Moss Colony, en honor al propietario del edificio, Benjamín Moss. Desde entonces ha servido como local de espectáculos para la ciudad de Nueva York.

No fue sino hasta el 8 de diciembre de 1930 cuando comenzó a llamarse Teatro Broadway, después de una serie de años de gran popularidad, en los que incluso había cambiado de nombre, pasando a llamarse Teatro Universal’s Colony. Casi desde sus orígenes, el Teatro de Broadway se convirtió en el mejor de la zona. Todos los mejores actores eran contratados aquí, y su fama personal crecía después de trabajar sobre sus tablas.

En 1956 el teatro incorporó grandes reformas. Se amplió el escenario y la capacidad, se mejoró la acústica y otros elementos para hacerlo mucho más atractivo. Así se mantuvo hasta 1986, cuando sufrió su segunda gran transformación.

Cuando tengáis pensado viajar a Nueva York, haced un hueco para ver si se lleva a cabo algún gran espectáculo en Broadway. Así podréis vivir lo que es la esencia y la historia de este gran teatro universal.

Foto Vía Access Atlanta