Egipto sin dudas es uno de los destinos de viaje preferidos por miles de personas cada año, tierra llena de misterios y leyendas, momias y tesoros culturales y arquitectónicos, con un paisaje en el que predominan las dunas de arena, el desierto y por supuesto las pirámides.
Situado en el norte de África, toca el Mediterráneo entre la tristemente famosa franja de Gaza y Libia y si bien es totalmente descabellado no visitar las ya mencionadas y famosísimas pirámides, este exótico y cálido país tiene mucho más que ofrecer a sus visitantes:
El Cairo: Es la ciudad más grande y capital de este país. Alberga al famoso museo del mismo nombre en el que se pueden apreciar antiguas reliquias y tesoros, además está situado en un lugar que permite una visión espectacular de la ciudad y respirar ese ambiente tan especial que mezcla culturas y razas y donde conviven en un equilibrio indefinible el Judaísmo, el Cristianismo y el Islam, junto a las orillas del mar rojo. Otra de sus principales atracciones es el Museo Egipcio para contemplar de cerca los tesoros de Tutankamón y las momias milenarias.
La Costa del Mar Rojo: Otra de las atracciones imperdibles si vas de visita a Egipto. Si tu presupuesto te lo permite puedes disfrutar de fantásticos resort con comodidades que rayan en lo lujurioso, incluyendo una sesión de buceo contemplando la espectacularidad de su vida submarina.
La Pirámide de Giza y la Esfinge: Simplemente imperdibles si vas a Egipto, su espectacularidad proviene no sólo de sus grandes dimensiones, que las sitúan entre los grandes monumentos del mundo, sino que también por el halo de misterio que las rodea y el hecho de ser consideradas entre las siete maravillas del mundo antiguo con sus cuatro mil años erguidas con el desierto de fondo.
El Río Nilo: Desde siempre ha sido la columna vertebral y el elemento que ha fecundado la vida del antiguo imperio, el largo y hermoso río, con sus historias de tiempos antiguos, héroes y personajes bíblicos. Mudo testigo del paso de reyes, faraones y dinastías. La mejor forma de disfrutarlo en la actualidad es a bordo de un crucero que te transportará a lo largo del río, bordeando esta misteriosa, subyugante y calurosa tierra.
El Oasis de Siwa: Es tal cual las películas, llena de olivos de edad incalculable y palmeras cargadas de dátiles y como todo en Egipto de historia, podrás apreciar la influencia árabe en esta cultura y un paisaje único y estremecedor. Realmente merece la pena visitarlo.
Abu Simbel: Gigantescas esculturas más que esculpidas, casi dibujadas en las duras rocas de granito, están consideradas entre las más hermosas y espectaculares estructuras hechas por el hombre. Emplazadas para entregar tributo perpetuo al Gran Faraón Ramses II y a la emperatriz Nefertiti, realmente te impresionan al verlas aparecer a la distancia e ir creciendo según llegas.
El Valle de los Reyes: La tierra donde reposan los restos de muchos de los grandes soberanos del antiguo imperio a través de Luxor en la ribera oeste del Nilo.
Luxor:El territorio de las momias por derecho propio, con su famoso museo y al lado del valle de los reyes, con su famoso y rico templo del mismo nombre y su homónimo de Karnak.
Hurghada: No todo es faraones, pirámides y momias. Esta ciudad es el mejor destino para disfrutar de su agitada vida nocturna. Famosa por sus clubes y bares, además de su bazar lleno de tiendas. Hurghada también ofrece a sus visitantes las maravillas del agua en sus diversas expresiones: Buceo, deportes acuáticos y el clásico tour en su barco de fondo transparente, que permite disfrutar del mundo submarino sin mojarse.
A pocas horas de vuelo desde cualquier punto de Europa, Egipto tiene mucho que ofrecer a sus visitantes; cultura, historia, diversión, compras y deportes hacen de este país de gente hospitalaria un destino imperdible para cualquier viajero por lo menos una vez en la vida.
Foto: Flikr