Una gran desconocida. Así es Groenlandia, la región de Dinamarca que no sólo tiene el privilegio de ser la mayor isla del mundo sino también el de poseer al hielo como protagonista pues este pasa a ser más del 80% de su superficie.
Por estas razones, está claro que, sin duda alguna, realizar una escapada a dicho rincón va a suponer una experiencia única e irrepetible. Y es que, además de certificar las dos citadas señas de identidad que hemos subrayado, también pertenece conocer urbes tan interesantes como su capital: Nuuk.
Una ciudad aquella, fundada en la primera mitad del siglo XVIII, cuya economía gira fundamentalmente en torno a la pesca, a la cría de renos y a lo que es el procesado del pescado.
Sus enclaves naturales son el principal atractivo del lugar pero no son el único pues además cualquier turista tiene la posibilidad también de disfrutar de otros espacios tales como su Catedral.
Iglesia de Nuestro Salvador es también como se conoce a dicho templo, realizado en madera, que se construyó en la primera mitad del siglo XIX y que se sitúa en la parte antigua de la ciudad. De culto luterano es aquella que tiene como principal seña de identidad su apariencia externa que la han convertido en característica: su color rojo.
Asimismo en Nuuk también es interesante realizar una visita al Museo Nacional. Y es que en él se permite conocer a fondo a Groenlandia gracias al conjunto de objetos que dan forma a las colecciones que conserva. En concreto, en este espacio expositivo toman especial protagonismo aquellos que giran en torno la arqueología, la historia o al arte.
El centro cultural Katuaq o la Universidad de Nuuk son igualmente interesantes rincones de lca capital del país.