De visita a la Catedral de Milán

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Uno de los monumentos imprescindibles en la ciudad italiana de Milán es su Catedral, también conocida por el nombre de Duomo de Milán, y es que la misma cuenta con una belleza y un valor inigualables.

Por eso, si has optado por  viajar a la citada urbe, gracias por ejemplo a vuelos a Milan online, te recomendamos que no pierdas la oportunidad de guardar algo de tu tiempo para conocer in situ el citado templo, que se enmarca dentro del estilo gótico y que tiene el privilegio de ser uno de los más importantes de todo el país.

En el siglo XIV, concretamente en el año 1386, fue cuando se pusieron en marcha las obras de construcción de dicha edificación que tiene entre unas de sus principales señas de identidad el hecho de que cuenta con unas dimensiones absolutamente sorprendentes: 157 metros de largo, lo que le permite acoger en su interior a unas casi 40.000 personas.

Cinco naves son las que dan forma a la Catedral en la que hay que hacer especial hincapié en diversos detalles a la hora de poder admirar y reconocer el valor y la riqueza de la misma. En concreto, entre sus elementos más significativos se encuentran, por ejemplo, las ventanas mayores instaladas en la zona del coro pues se consideran las más grandes del mundo.

No obstante, tampoco hay que pasar por alto a La Madonnina, una escultura de bronce realizada en 1774 por el artista Carlo Pellicani, que ejerce como punto más alto de este templo de Milán.

Los altares de Pellegrini, la singular belleza del presbiterio renacentista, el monumento a Arcimboldo o los sarcófagos que conserva, y que en su mayoría pertenecen a figuras religiosas de gran prestancia, son otros de los elementos que han hecho del Duomo un lugar de valor artístico.