Burdeos, mucho más que la ciudad del vino

 Puerto de Burdeos

Dicen los que no la han visto que la ciudad de Burdeos es famosa por sus vinos, pero los que hemos tenido la oportunidad de admirarla nos hemos deslumbrado con su maravillosa arquitectura del siglo XVIII, sobre todo en la maravillosa zona del Puerto de la Luna. Así se conoce en Burdeos al centro histórico, recientemente designado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

El Puerto de la Luna se encuentra en el corazón de Burdeos, una ciudad portuaria al suroeste de Francia, construida en torno al río Garonne. El puerto se ganó el apelativo de Puerto de la Luna debido a su forma de media luna. Esta zona es un maravilloso conjunto arquitectónico creado en la época de la Ilustración, cuyos valores continuaron hasta la primera mitad del siglo XX, con más edificios protegidos que en ninguna otra ciudad en Francia, exceptuando París.

Esta zona fue reconocida por el papel que tuvo a lo largo de los siglos como un valiosísimo rincón comercial y de intercambio de valores con Gran Bretaña, sobre todo desde el siglo XII. Su forma urbana representa el éxito de los filósofos que quisieron convertir a las ciudades en núcleo del humanismo, la universalidad y la cultura.

A decir verdad, la ciudad es también conocida por su vino, que se produce desde el siglo VIII. Pero claro, no sólo de vinos vive Burdeos, sobre todo cuando nos adentramos en las profundidades del centro histórico, y contemplamos el devenir de los siglos sobre sus calles.

El puerto de Burdeos fue uno de los más activos de Europa en el siglo XVIII, y la mayoría de sus edificios fueron construidos entre los años 1500 y 1800. El Quartier de Saint Pierre, también conocido como el viejo Burdeos, es mucho más antiguo sin embargo. Algunos de los mejores ejemplos de la arquitectura del siglo XVIII se pueden encontrar en la Place Royale, que ahora es la Place de la Bourse, en el Gran Teatro y en la Allées de Tourny.

Junto con los edificios públicos del siglo XVIII, un gran número de casas históricas se levantan en la línea de los muelles del Garonne, una zona que en la noche toma una actitud tremendamente evocadora. Víctor Hugo, el famoso poeta y novelista francés del siglo XIX, llegó a decir: «Si tomamos Versalles, y le añadimos Amberes, tendremos a Burdeos».

Además de su puerto y su vino, la ciudad también tiene una importantísima vida cultural, con numerosos museos, incluido el de Bellas Artes, el Museo de Arte Moderno, el Museo de Aquitania y el Museo de Artes Decorativas.

Foto: Fuente Relaischateaux