En Canarias, Fuerteventura se erige como una isla potente que alberga una gran cantidad de turistas durante todo el año. Los viajes a Fuerteventura en barco o en avión nos transportan a una gran calma y sensación de paz y tranquilidad.
En el famoso municipio de Antigua encontramos una gran diversidad de paisajes, colores y patrimonio cultural único. Sus momumentos son especiales y forman parte de la historia de todas las Islas Canarias.
Paseando por su centro, nos toparemos con la ermita de San Isidro, la iglesia de Nuestra Señora de Antigua o la ermita de San Roque, cada una de diferente estilo arquitectónico y los colores blancos tan tradicionales del lugar.
Al margen de los edificios religiosos, los yacimientos arqueológicos también son notables. Algunos albergan grandes superficies con restos muy importantes que se convierten en veraderos museos al aire libre.
Recorrer Antigua también nos sirve para conocer los deportes náuticos que se practican en la zona. El surf o el windsurf son de especialidades escogidas por deportistas de medio mundo que encuentran aquí el lugar ideal para su práctica. Los campos de golf también son numerosos, y acaban siendo destinos de turistas del norte de Europa que celebran sus campeonatos.
Si seguimos de visita, es de destacar las Salinas del Carmen, catalogadas como Bien de Interés Cultural por sus tradicionales paisajes. También recomendamos los hornos de cal de la guirra, los típicos molinos o el castillo más importante de la zona.
Pero está claro que lo que más llama la atención son sus playas. Impresionantes y algunas prácticamente vírgenes, son la verdadera atracción del lugar y razón principal del porqué de la llegada de tantos turistas. Sus infraestructuras hoteleras son de alta calidad y permiten alojarse a primera línea de mar, donde poder ver el mar directamente desde la habitación.
Foto: ronsaunders47