Si bien la mayoría de personas conoce a Egipto por sus fabulosas pirámides, existen en este mismo país diferentes templos y otros maravillosos monumentos que son parte del legado de la humanidad.
Así, Abu Simbel situado a unos 300 kilómetros de Aswan, es uno de los complejos de templos Ramses II, que se han excavado aprovechando la misma roca. De hecho, fue este emperador uno de los faraones más importante del antiguo Egipto, quien lo mandara a construir unos 1,280 a.C. y terminase 20 años después.
El propósito de esta enorme obra fue el de impresionar a los vecinos del sur y por tanto, fortalecer el prestigio del país y por ende la del mismo faraón, quien se creía un dios ante todo el pueblo.
De esta manera, este complejo tiene dos templos, el más grande tiene dos grandes estatuas de Ramses II y está dedicado a los dioses Ra, Ptha y Amón; el menor está dedicado a la diosa Hathor, que personifica a la esposa favorita del Faraón, Nefertari.
Sin embargo, es la belleza del primer templo el que marca diferencia entre uno y otro, ya que solo su fachada cuenta con 33 metros de alto y cuenta con la estatua del emperador de unos 20 metros. Estas se encuentran esculpidas en la misma roca, lo que sin duda es un trabajo descomunal si se piensa en las altas temperaturas de Egipto.
Algunos consejos
Cuando decidas hacer el viaje, es mejor hacerlo en grupo e incluir una excursión. Además se puede optar por la modalidad autobús o también avión. En el caso de viajar solo, en Aswan existen diferentes agencias en donde también se pueden encontrar autobuses diarios
Con respecto a los hoteles, pues existen pocos hoteles en el pueblo más próximo, por lo que se recomienda hacer la visita en un mismo día si es que no se cuenta con una reserva.
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