¿Alguna vez habéis estado en Honduras?. Si nunca os ha dado por pensar en este país como destino turístico de vacaciones, yo creo que deberíais empezar a hacerlo. La belleza natural y sus ruinas históricas bien merecen ser visitadas. Pero hoy os quieron hablar de mi destino favorito en Honduras.
Frente a la costa continental de Honduras se sitúa Amapala, una de las islas más hermosas del Pacífico. Se puede llegar muy fácil desde Tegucigalpa, la capital de Honduras, ya que apenas se encuentra a dos horas por carretera. No en vano son muchos los hondureños que escogen Amapala como su lugar de vacaciones.
En Amapala siempre es verano. La temperatura siempre gira en torno a los 30 grados, por lo que podéis bañaros en sus playas siempre que vengáis. En invierno llueve un poco, pero no demasiado. Pero curiosamente incluso cuando llueve se mantiene la misma temperatura.
Amapala es en realidad un archipiélago de islas. Las principales son El Tigre y Zacate Grande, y en ellas encontraréis las mejores playas del lugar, como Playa Grande, Playa Negra, Playa Islitas, Playa Gualora y Playa el Burro. La mayoría de estas playas tienen arena negra volcánica, y no tienen demasiadas olas, por lo que son ideales para venir en familia.
En los últimos años han mejorado muchísimo los servicios turísticos en Amapala. Se han construido nuevos y mejores hoteles, restaurantes, hay muchos más transportes dentro de la ciudad y barcos para poder ir fácilmente de una isla a otra.
Precisamente yo os recomendaría dar un paseo por la bahía en uno de estos barcos. Se suele tardar apenas unos 40 minutos, pero la experiencia es maravillosa. La mayoría de los barcos son pequeños, por lo que sentiréis plenamente la brisa del mar junto a vosotros.
Otra de las grandes experiencias que se pueden vivir en Amapala es subir hasta la cima de su montaña más alta. No preocuparos, sólo tiene 800 metros de altitud. Nosotros lo hicimos el último día que estuvimos, con el cansancio ya acumulado, y se hace perfectamente. Las vistas desde allí son impresionantes. En un día claro se puede distinguir casi toda la costa de Honduras, El Salvador y Nicaragua al mismo tiempo, además del Golfo de Fonseca.
Ni que decir tiene que, si tenéis la oportunidad, y os gustan los viajes nuevos y exóticos, esos a los que casi nadie ha ido, Amapala en Honduras es vuestro destino.
Foto Vía Ipernity
